Como adulto responsable que eres, te habrás dado cuenta que cuando tu trabajo depende de alguien más. las cosas no siempre salen bien. Te preguntas… ¿Es necesario trabajar con otras personas? La respuesta, a continuación… Julián Pérez ha fracasado en 3 proyectos empresariales. Él se lo atribuye a la falta de compromiso y entrega de la mayoría de sus colaboradores, es de los que piensa “Si quieres que las cosas se hagan bien, hazlas tú mismo.” Él cuestiona, ¿por qué trabajar con otras personas? La respuesta está en la “Ventaja comparativa”. Este es un concepto que surgió de la economía. En la Ley de ventaja comparativa de David Ricardo Publicada en 1817, en el libro Principios de economía política y tributación. La Ley, daba respuesta a una pregunta de política internacional: ¿Es mejor para la economía de un país ser autosuficiente y producir todos sus bienes… o especializarse en producir algunos y luego comercializar con el resto de los países? Tomó como ejemplo a Portugal e Inglaterra, Ricardo calculó que aunque ambos fueran capaces de producir tejidos y vino, Inglaterra produciría tejidos sin desplegar tantos esfuerzos; y Portugal se destacaría por su producción de vino. En lugar de que Portugal e Inglaterra perdieran tiempo… y dinero esforzándose en producir bienes en los que no se destacarían; Ricardo sostuvo que se enriquecerían si primero se especializaban y luego comercializaban entre sí.
[Julián] ¡Aaah! Ya entendí. La ventaja comparativa consiste en capitalizar las fuerzas y no permitir que afloren las debilidades… Es decir, tener en mi equipo personas con distintas habilidades; aumenta la probabilidad de que el equipo no se atasque, en una situación adversa, ¿verdad?
¡Así es Julián!, estás en lo correcto… deberás, ser más observador en las habilidades que tu equipo posee para que tus proyectos puedan tener éxito.
Julián ya conoce el concepto de ventaja comparativa y de cómo ser más observador le puede ayudar en sus proyectos. Cada lunes estaremos publicando selvvideos de negocios como este. Asegúrate de no perder los siguientes episodios…
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[Julián} Oye narradora y, ¿a qué hora sales por el pan?
[Narradora] No como pan, Julián
[Julián} Oye narradora y, ¿tú crees que tengo talento?
[Narradora] ¡Sí Julián!… ¡tienes talento!
[Julián}¡Lo sabía!, ¡Te gusto!, ¿verdad?
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